Ciudad de la Habana, 9 de enero de 2011

Consejo de Relatores de Derechos Humanos de Cuba

Centro de Información

Breve Relato anual sobre los Derechos Humanos en Cuba

Enero a Diciembre de 2010

Introducción

El Gobierno Cubano asesinó al prisionero de conciencia negro Orlando Zapata Tamayo, quien murió el 23 de febrero de 2010 en una dramática Huelga de Hambre de 83 días y después de 7 años de cárcel, tormentos, descomunales palizas, destierros y violaciones sistemáticas de sus derechos humanos y penitenciarios. En memoria a su nombre sus generales son incluidas en el primer anexo de este trabajo.

El Consejo de Relatores de Derechos Humanos de Cuba saluda la liberación de cerca de un centenar de prisioneros políticos en 2010 y el compromiso público por parte de las máximas autoridades cubanas de continuar con estas excarcelaciones, pero rechaza la limpieza política que las mismas vienen llevando a cabo, enviando a estos reos a la República Española bajo una voluntad viciada, la ralentización marcada e injustificada de este proceso, con el consiguiente incumplimiento del plazo de 4 meses establecido por el propio Gobierno, así como la continuidad de sus acciones de aniquilamiento de la salud física y psíquica de los prisioneros de conciencia que aún aguardan su liberación. El anexo 2 de este informe es una tabla Excel que recoge todos los datos esenciales de los prisioneros políticos que lograron salir de prisión en 2010. En este Sentido nuestro Consejo agradece profundamente a todas las personas físicas o jurídicas que se esforzaron durante muchos años y aún trabajan para una Cuba sin prisioneros políticos.

Nuestra Institución también reconoce la disminución ostensible de los enjuiciamientos y encarcelamientos por motivos políticos en este período, constatando solo unos 30 casos producidos bajo causas y condiciones enrarecidas por el Gobierno, que pudieran tener una connotación política significativa, los cuales continúan siendo investigados por nuestros relatores. En el año 2009 unos sesenta defensores de derechos humanos fueron encarcelados o enjuiciados por los tribunales por motivos políticos y en 2008 confirmamos 67 casos similares. El anexo 3 de este informe es una tabla Excel que recoge los datos fundamentales de parte de los procesados arriba mencionados, la cual será publicada este 10 de enero.

Según las verificaciones del Consejo de Relatores aún quedan cerca de 80 prisioneros políticos encarcelados. El anexo 4 de este informe es un documento Excel que contiene datos fundamentales de los presos políticos y o de conciencia que todavía permanecen en las cárceles cubanas.

Otras organizaciones que tratan esta problemática dentro y fuera de Cuba, apuntan a una cifra mayor de reos políticos, que pudiera sobrepasar los 120 penados. El anexo 5 de este informe será publicado el jueves 13 de enero próximo, y es un documento Excel que recoge la mayoría de estos otros casos y las circunstancias que los acompañaron al momento de ser detenidos y procesados. El Consejo de Relatores confirmó fehacientemente que estos fueron encarcelados por acciones no motivadas por razones políticas y la gran mayoría de los encausados no pertenecían a ninguna organización disidente cuando fueron Arrestados y encarcelados.

Aunque las autoridades han hecho gestos e intentos positivos, el horrendo cuadro carcelario no mejora. Mantienen unos 300 centros penitenciarios enclavados en todo el país, de los cuales aproximadamente 100 son extremadamente rigurosos. Según las investigaciones del CRDHC la población penal común supera con creces los 150000 reclusos, gran parte de los cuales sobreviven hacinados y en su mayoría son jóvenes y de piel negra. Las injustas y excesivas condenas, el rigor extremo, la magra y putrefacta alimentación (salcocho), las Palizas y los malos tratos a los reos, El hacinamiento, la negación de asistencia médica y la carencia de agua (poca y sucia), los confinamientos en solitario y el general abandono, son entre otras, las causas de las frecuentes y evitables muertes y suicidios, que han arrojado la alarmante cifra de más de mil reclusos muertos en los últimos 10 años; Tan solo en 2010 constatamos cerca de un centenar de estos fallecimientos solo en unas 40 prisiones. Estos problemas son también las detonantes de las diarias protestas, que mantienen regularmente a cientos de penados plantados en huelgas de hambre. Por citar un solo ejemplo: al momento de redactar este informe 26 reos comunes permanecen en huelga de hambre en la Prisión de Boniato de Santiago de Cuba, exigiendo justicia y el cese de los malos tratos. Agrava el panorama carcelario cubano el alto consumo de drogas, el alcoholismo y las armas cortantes de fabricación caseras (pinchos y cuchillos) en manos de los reos, que al igual que las drogas y el alcohol son introducidos en muchas prisiones, regularmente por los propios guardias, a cambio de pagos, favores y trueques.

Varios miles de trastornados mentales severos, minusválidos, ciegos y enfermos críticos yacen en esos infernales centros, en condiciones deplorables y bochornosas, agonizando por décadas y careciendo en la mayoría de las veces de la asistencia médica. El Gobierno concedió algunas licencias extrapenales en 2010 a reos ciegos y a otros minusválidos y enfermos, entre ellos a los invidentes Eduardo Silva Batista y Manuel Cabrales.

Las autoridades continúan encarcelando a seres humanos inocentes bajo los índices de Peligrosidad Social Pre-delictiva, manteniendo a miles de personas encerradas en sus cárceles y sometidas a trabajos forzados por esta causa , es decir sin cometer delito alguno. Las jóvenes prostitutas víctimas de estas injustas medidas rondan el millar. También se mantiene encarcelando a la población civil mediante ficciones jurídicas, por fabricados delitos tales como: salida ilegal, desacato, desobediencia, resistencia y atentado.

El 25 de abril de 2010 el Gobierno Cubano celebró lo que dio en llamar: Elecciones de base. Este de principio a fin fue un proceso espurio y viciado sin valor alguno para el Pueblo Cubano y para cualquier persona amante de la libertad y la democracia en el mundo. Todo el proceso fue dirigido, organizado y controlado por el Partido Comunista único, quien postuló a todos los candidatos y efectuó los escrutinios bajo el terror y un aparatoso despliegue policial. La esclava, aterrorizada y hambrienta población, en lo que puede considerarse la más masiva muestra de rechazo al Gobierno, respondió en muchos lugares del País anulando las boletas con frases y consignas antigubernamentales tales como: arroz, frijoles, carne; lo que tenemos es hambre, Abajo Fidel. La Seguridad del Estado practicó numerosos arrestos de ciudadanos que protestaron en esta y otras formas pacíficas.

En 2010 el Gobierno Cubano cambió el método y foco de la represión política, abandonando sus usuales mecanismos tribunales-cárceles, para centrarlos directamente sobre los disidentes, sus viviendas y actividades, erradicando casi totalmente la represión política carcelaria, a costa de la más alta cuota de sufrimiento, represión y terror callejero que ha padecido el Pueblo Cubano en la historia de su lucha civilista y pacífica por su libertad y el respeto de los derechos humanos, arrojando como resultado cifras tan elocuentes como el hecho de que los militares de la Seguridad del Estado llevaron a cabo centenares de violentos actos de repudio a lo largo de todo el año y practicaron más de 4000 arrestos políticos, la mayoría de ellos violentos, arrastrando o apaleando a los defensores de los derechos humanos; Dando muchas veces muestras evidentes a la opinión pública nacional e internacional de la utilización del abuso y el crimen para imponer el terror público y mantener el control político absoluto, ejecutando estos abucheos en gran parte de la geografía nacional, donde en numerosas ocasiones las víctimas recibieron furibundas palizas a manos de los oficiales de la policía política y las bandas paramilitares azuzadas por las autoridades. Por su extrema crueldad resaltan los actos perpetrados reiteradamente (domingo tras domingo) contra Reina Luisa Tamayo Danger, madre del mártir Orlando Zapata; los apedriamientos contra la vivienda de los Lovaina en Baracoa, Guantánamo y los sucesos infamantes contra las gloriosas Damas de Blanco.

El Consejo de Relatores observó que este dramático aumento de la represión política contra la oposición pacífica y la disidencia interna tuvieron siempre el objetivo de impedirles agruparse y organizar actividades cívicas y pacíficas, amparadas en los Pactos Internacionales de Derechos Civiles, Políticos, Económicos, Sociales y Culturales, los cuales el Gobierno de la Habana dice querer respetar y aún mantiene sin ratificar. Estas acciones fueron recrudecidas por lo regular para sofocar, incluso, las actividades cívicas más discretas a efectuarse dentro de las viviendas privadas, hacia las cuales, por lo regular, no se encaminaron más de una trentena de personas, que fueron arrestadas, amenazadas u obligadas a abandonar el lugar y las que en ningún caso constituyeron un peligro para la gobernabilidad o estabilidad del Gobierno. Hay que subrayar que sin lugar a dudas, las manifestaciones pacíficas reprimidas con más ferocidad fueron, en todos los casos, las programadas o efectuadas en las calles y parques públicos.

Continúan las severas restricciones gubernamentales a la libertad de movimiento de los líderes opositores, el corte y escucha de las llamadas telefónicas de los defensores de derechos humanos, el allanamiento de sus viviendas, el decomiso de sus bienes y otras numerosas acciones hostiles.

El Gobierno mantiene sus tradicionales férreas ataduras sobre los factores del desarrollo económico, pero en los 2 últimos meses alivió la represión económica contra los ciudadanos, sobre todo los más pobres, sector integrado por los discapacitados, enfermos, ancianos, divorciadas y otros desamparados sociales, los cuales hoy pueden vender servicios, productos y bisuterías, sin ser acosados por las fuerzas de inspectores y policías a diario, gracias además, a normas jurídicas que promulgó para favorecer la actividad por cuenta propia. Al respecto la población se queja por los exorbitantes e irracionales impuestos.

La libertad de culto y religión permanece constreñida al estrecho marco de los antiguos templos de las denominaciones existentes desde antes de la llegada al poder del Gobierno de los hermanos Castro, el cual se niega a reconocer e inscribir a nuevas organizaciones cristianas, aún en los pueblos donde no hay ninguna, y a promover una legislación adecuada. Numerosos proyectos y obras evangélicas en todo el país están sufriendo el acoso de las autoridades actualmente y no pocas fueron cerradas y destruidas en los últimos tres años. La prédica cristiana en las calles, plazas, parques, trenes, ómnibus o de casa en casa no sólo está terminantemente prohibida, sino que es perseguida con acritud. El acceso a los medios de difusión masiva (radio, televisión y prensa escrita) es nulo. De forma general, se mantiene un alto grado de hostilidad por parte de las autoridades gubernamentales contra la fe cristiana. En las cárceles no se permite la circulación de materiales de lectura religiosa, la prédica, ni la reunión de los cristianos. Las autoridades Políticas Cubanas emprendieron nuevas acciones contra la Iglesia Apostólica Cubana, arreciando sus acciones de persecución, llegando a arrestar varias veces a camiones repletos de cristianos y después de obligarlos a bajar de los mismos, los dejaron abandonados en parajes solitarios.

Respetuosamente nuestro Consejo ha fundamentado algunas recomendaciones sobre los derechos humanos en Cuba, las cuales considera pudieran ayudar a mejorar esta problemática y que exponemos a continuación:

Recomendaciones al Gobierno Cubano para aliviar la crítica situación de derechos humanos en nuestro País.

1. Resolver el conflicto que mantiene desde hace 10 meses con la madre del mártir Orlando Zapata Tamayo, Reina Luisa Tamayo Danger, y sus familiares y poner fin de inmediato a los arrestos, palizas y actos de Repudio contra ellos.

2. Poner en libertad inmediata y sin condicionamiento alguno a todos los presos políticos y de conciencia cubanos que aguardan en las cárceles su libertad, conforme a los compromisos públicos formulados por el propio Gobierno Cubano y a los esfuerzos hechos por el Mártir Orlando Zapata, las valientes Damas de Blanco, Guillermo Fariñas, la disidencia Cubana, la Iglesia Católica nacional, la Unión Europea y el Gobierno Español, para alcanzar una cuba sin prisioneros políticos.

3. Erradicar totalmente los enjuiciamientos y encarcelamientos por motivos políticos y Renunciar a los actos de repudio, las palizas, la violencia y al uso de las acciones de terror político, como método de control totalitario de la sociedad y del estado.

4. Tramitar a la mayor brevedad posible la visita a Cuba y especialmente a sus prisiones, de los relatores de las Naciones Unidas Y de otros respetables observadores internacionales de derechos humanos.

5. Poner en libertad inmediata e incondicional a todos los ciudadanos inocentes encarcelados sin cometer delito alguno (peligrosidad Social Pre-delictiva) y a todos los que mantiene encarcelados por delitos que solo lo son en Cuba, por ejemplo: acaparamiento, hurto, sacrificio, tráfico y venta de ganado mayor.

6. Continuar Concediendo licencia extrapenal a todos los minusválidos y extremadamente enfermos que yacen en las cárceles, que su crítico estado de salud los hace incompatibles con el régimen carcelario y recluir en centros de salud a los Varios miles de trastornados mentales severos que deben sanciones y pudieran constituir un peligro para la sociedad.

7. Emprender profundas reformas carcelarias, cambiando radicalmente su programa y política penitenciaria, atemperándolos a las Reglas Mínimas para el Tratamiento a los reclusos de la ONU y prohibir los tormentos, las torturas, las palizas y los malos tratos a los reclusos, castigando a los verdaderos criminales y mejorando sustancialmente las condiciones de reclusión, especialmente la alimentación, asistencia médica, religiosa, baños, dormitorios y los derechos a la información y comunicación.

8. Prohibir el destierro de los penados y todo tipo de castigo a sus familiares, devolviendo a miles de presos a sus respectivas provincias.

9. Abolir la Pena de Muerte.

10. Emprender con urgencia una revisión total del vigente Código Penal, Destipificando todas las conductas no dañosas, despolitizándolo y ajustándolo a los progresos alcanzados por las ciencias penales en el mundo.

11. Ratificar inmediatamente y comenzar a respetar los Pactos Internacionales de Derechos Civiles, Políticos, Económicos, Sociales y Culturales, así como los demás convenios Internacionales de esta materia, publicándolos, conjuntamente con la Declaración Universal de los Derechos Humanos, en los medios de prensa escrita, radial y televisivos del Gobierno Cubano.

12. Crear, con la ayuda y supervisión de la Comunidad Internacional, un programa de auxilio urgente para proteger a todos los desamparados sociales, especialmente: a los Ancianos, niños, impedidos físicos, enfermos mentales y mujeres en necesidad, proveyendo alimentos, medicinas, asistencia médica, Ropas, y viviendas. En este sentido el gobierno Cubano debe poner fin a los abusivos desalojos y modificar la ley general de la vivienda, permitiendo la compra y venta de las mismas y que los ciudadanos ejerzan plenamente los derechos de propiedad privada sobre todos sus bienes.

13. Dejar de perseguir a la Iglesia cristiana y respetar la libertad de culto y religión, modificando la Ley de Asociaciones y permitiendo la inscripción legal de todas las denominaciones e instituciones existentes actualmente en todo el País, devolviéndoles sus propiedades confiscadas, facilitando la construcción de nuevos templos y abriendo totalmente su acceso a la prédica en las calles, plazas, parques, trenes, ómnibus o de casa en casa, a los medios de difusión masiva (Radio, Televisión y prensa escrita).

14. Continuar Liberando las ataduras que mantiene sobre las fuerzas de los servicios, la producción y los factores del desarrollo económico que impiden a la población trabajar honradamente por su subsistencia, bajando los niveles de la represión social y disminuyendo las fuerzas de inspectores y policías que operan en las vías públicas.

15. Eliminar la tarjeta blanca o permiso de salir legalmente del país y dar curso normal a la salida de todas las personas que han obtenido visa para viajar al extranjero, ya sea de forma temporal o definitiva, incluyendo a los médicos y demás profesionales, aboliendo todas las restricciones y obstáculos a este trámite.

16. Respetar su propia Constitución y leyes y no continuar expulsando y desterrando de la Capital de todos los cubanos a los ciudadanos del interior del territorio nacional, lo cual es una de las formas actuales más amargas de discriminación y segregación que sufre la mayoría de la población.

El directorio telefónico de los miembros del Consejo de Relatores es el anexo 6 de este documento, el cual se publicará el viernes 14 de enero próximo.

Somos absolutamente responsables de todos los criterios emitidos por nosotros en este informe y conservamos los archivos de videos, audios y escritos de las denuncias hechas por las víctimas, sus familiares y los testigos, los cuales estamos listos para facilitar con sus nombres, apellidos, direcciones y teléfonos.

Nuestro centro de Información radica en la calle Mayía Rodríguez, edificio 459 apartamento 305, e/ Carmen y patrocinio, la Víbora, Municipio 10 de Octubre, Ciudad de la Habana.

Tel: 649 96 63, la casa y móvil: 05 273 09 68.